Las granjas de caza representan una opción para practicar la caza. Se trata de una iniciativa que contribuye a conservar la naturaleza, aunque no está exenta de problemáticas. Por ello, resulta necesario conocerlas en detalle, así como su funcionamiento, sus ventajas y desventajas.
Ir de caza en invierno es una experiencia única, pero requiere tomar ciertas precauciones porque es importante prepararse adecuadamente. Para eso, se ha de prestar mucha atención a la indumentaria, a la protección de los perros ante el frío y a la conservación adecuada de las armas.
Los trofeos de caza son partes especiales de los animales que pertenecen a la caza mayor y menor, como jabalíes, muflones o zorros. Las cabezas, las cornamentas y los colmillos se preservan en un salón de trofeos y representan una evidencia clara de las destrezas del cazador.
Humanizar a los perros quiere decir atribuirles las mismas cualidades y emociones que a las personas y tratarles como tales. Vestirles, organizarles fiestas de cumpleaños, acostarles en una cuna o incluso ponerles calzado son comportamientos derivados de ello. Esta actitud puede entenderse en la línea de una transformación del concepto de mascota. Esta ha pasado de ser un acompañamiento fiel a, prácticamente, el sustitutivo de un hijo, al que hubiera que cuidar de la misma manera.